¿Qué tan difícil puede ser?

No compartir tus pensamientos no es nada malo, pero encerrarte a ti mismo es lo que los contamina.

Esas palabras no me las han dicho nadie. Incluso resultan ser ideales para compartir una foto con ellas. Pero... no.

Quiero que sepan (y puede que ya lo haya insinuado bastante) que los pensamientos que compartimos en una red social en estos tiempos, se ha vuelto normal. Y si leen eso, verán a simple viste que no tiene nada de qué preocuparse. Sin embargo, aquí estoy yo dándole lata.

A estas alturas, muchos ya habrán percibido que lo normal ya es aburrido. Pues mucho de lo mismo se vuelve cada vez menos interesante.

Es muy común hacer eso que dije anteriormente, compartir una foto con algún pensamiento propio o citar a algún célebre personaje de la historia. Pero eso lo hace todo el mundo. No te van a premiar por eso. Quizás unas cuantas reacciones de tus amigos mas cercanos en las redes. Sin embargo, ahí se queda. Menos del 5% de tu friend list son los que te regalan un poco de tu atención... y ya.

Pasa el tiempo, y en vez de tu compartir algo que pienses, compartes la muerte de algún familiar. ¡Qué sorpresa! Recibiste mas atención de un momento a otro. Eso te hace cambiar, y compartes cada vez menos porque quizás llegaste a la conclusión de que era una perdida de tiempo.

Pasan los años, te casas. Muchas felicitaciones. Te gradúas. Muchas bendiciones. Tu primer hijo. A estas alturas, si has sido una persona agradable, ya todo lo que compartes es digno de dejar una reacción.

Pero fíjate... eso no pasa de ahí. Siempre has sentido que es diferente en tu vida diaria. No ves a muchos de esos que te deseaban siempre lo mejor y que decían estar apoyándote.

Tampoco te sumerjas en esos pensamientos. La vida no solo gira en torno a ti.

Cada quien tiene sus propios problemas, y es normal descuidar a los demás cuando estás tan enfocado en alcanzar una meta. Muchos ni pueden seguirte el paso porque carecen de dichas metas, y pues... ni se dignan en hacer algo para cambiar. O quizás ellos solo necesitan ayuda para encontrar sus metas.

Pero es decepcionante. ¿Qué tan difícil puede ser convencerte a ti mismo que necesitas seguir tus sueños para ser feliz? ¿Que es mejor alardear tus logros, y no atacar a los que han logrado algo?

¿De qué les ha valido ser tan terco? Ya en este punto, al menos yo, trato de desligarme de esas personas. Esas que solo están atados a la rueda que los hace repetir lo que no les ha traído ningún beneficio hasta ahora. Pobre de ellos.

Es siempre imperativo que formes una coraza protectora contra esas personas. Porque créeme... querrán arrastrarte hacia donde están ellos de nuevo. Que hayas logrado salir de lo que siempre ha sido común en tu vida ya es en sí un logro.

Compárate con tu yo de hace un tiempo. Si crees que ha sido lo mejor que has hecho, pues te felicito; estás mas cerca de lograr lo que quieres. Si es lo contrario, no te alarmes... es incluso un logro que estés leyendo esto. Sin embargo, aprovecha el momento.

Siéntate a meditar un poco, y olvídate del fastidioso tiempo. Que si me lo preguntan, el tiempo siempre es lo que nos fastidia.

Date unos momentos para pensar diferente. No es nada difícil hacerlo, pero créeme... es un logro que lo hagas...